Hola,
Todos sabemos lo que es la adrenalina, o al menos hemos sentido sus efectos en algún momento; cuando sentimos miedo, alegría o placer, segregamos esta hormona neurotransmisora que acelera el ritmo cardíaco, lo que te permite - en algunos casos - actuar de una forma que no serías capaz en circunstancias normales. Seguro que habéis visto películas y series en las que inyectan epinefrina (su nombre internacional más técnico) en el corazón de un paciente que entra en parada cardíaca o que está a punto de hacerlo.
¿Cómo se "come" esto de la adrenalina en el título junto a la UEM?
Pues muy fácil; ya dije en alguna de las primeras entradas de este blog que pasé un verano un poco asustado por la que se me venía encima en mi vuelta a la Universidad; esa pizca de susto se convirtió en pánico cuando empezaron las clases y vi todo lo que tenía que afrontar, y probablemente ese pánico produjo una descarga de adrenalina que me ha mantenido acelerado todo el primer trimestre; el efecto secundario es el agotamiento; acabé el primer trimestre en un estado más que lamentable.
Esta adrenalina hizo que, teniendo 4 asignaturas importantes (también he dicho ya que la teóricas vaquillas eran miuras camuflados intentando empitonarme) y una carga profesional razonable, pudiese dar lo mejor de mi mismo y sacar unas notas por encima de mis expectativas ... y de las de otros; tuve que quitarme casi todos mis vicios (lectura, las películas, el "dolce farniente", etc.) o placeres como disfrutar de muchas actividades con mi Familia (lo más importante que tengo)
Tratando de recuperar fuerzas pasé unas vacaciones de Navidad ... vamos a decir relajadas ... siendo benévolo conmigo mismo. Volvemos a clase - y yo creía que con ganas - y parece que mi organismo seguía en modo vacaciones, es decir, ahorro de energía. Sólo dos asignaturas (la mitad que el primer trimestre) y menos de un 60% de las horas de clase que tuve en el primer trimestre, me hacían estar razonablemente tranquilo; hacía la reflexión en mi cerebro - que yo creo que estaba en stand-by - sobre "si he sido capaz de sacar como he sacado el primer trimestre, este segundo lo hago con la gorra".
En eso andaban mis pensamientos cuando me he dado cuenta de que llegaban los primeros parciales ... y me ha entrado tal susto, que he tenido una descarga masiva de adrenalina que me ha permitido ponerme en marcha y sacar razonablemente los exámenes.
He hecho propósito de enmienda, y voy a ir al día, como que me llamo Jaime; si veo que me relajo, o me pongo una inyección de epinefrina o hago "puenting" para tener un subidón de adrenalina y así desperezarme, pero no estoy dispuesto a pasar los agobios de esta última semana. Es cuestión de organizarse un poco.
Además, da la casualidad de que las dos asignaturas son muy interesantes y plantean retos diferentes; en una, en la que repito profesora, tengo que conseguir entender los cuestionarios de examen - la asignatura la entiendo bien - para superar la nota a la que me aboné (la más baja en el tiempo que llevo en la UEM) y en la otra, voy a tratar de sacar muy buena nota y que remita ese rechazo visceral que tengo por la estadística, y por las normativas y sus "padres putativos" (parece que las hacen abogados)
Hace muchos años hice un curso de aprovechamiento del tiempo (me impactó el tema de los "ladrones del tiempo"); quizá debería intentar repasar los conceptos y aplicarlos de nuevo.
Hasta pronto
¡Cuánta razón tienes!
ResponderEliminarHace tiempo leí en algún sitio que el tiempo es irrecuperable e irremplazable. Hay que aprender a gestionar bien nuestro tiempo si queremos ganar en calidad de vida y no dejar de lado ninguna de las cosas que realmente nos importan.
Tengo decidido hacer una entrada sobre el tiempo y el futuro; esperaré a un día que esté inspirado y tenga tiempo. Quizá la organización de mi tiempo ha sido el mayor reto que he afrontado al volver a la universidad, porque estudiar lo que se dice estudiar nunca lo dejé del todo, aunque las neuronas también envejecen una barbaridad.
ResponderEliminar